¿Qué beneficios aporta la robótica a los niños?

Cada vez es más frecuente encontrar opciones para que los niños se inicien en el mundo de la robótica, los videojuegos o la programación. Sin duda, es una buena manera de potenciar sus capacidades y ofrecerles un aprendizaje. Pese a que éste está cada vez más demandado, es complicado encontrarlo en la educación obligatoria. Como mucho veremos alguna actividad extraescolar, pero nada más.

No hablamos de prepararlos u orientarlos a una profesión de futuro. Se trata de ayudarles a desarrollar habilidades que les permitan afrontar y resolver problemas y que potencien su creatividad o fomenten el pensamiento crítico. Esto es algo que la educación actual no tiene entre sus principales objetivos. Nos encontramos con un sistema más centrado en la memorización que a la larga puede derivar en una perdida de interés. Sin embargo, este tipo de actividades consigue llamar su atención y aumentar la motivación.

En concreto la robótica es una actividad que no sólo les permitirá disfrutar con el uso de la tecnología, si no que además les convertirá en creadores. No consiste en aprender a usar una técnica o una ciencia. Se parte de afrontar un problema e idear una solución al mismo, para a continuación ponerla en práctica y desarrollarla hasta el final. En este proceso el niño tiene que plantearse por qué una solución es mejor que otra. Además, aprenderá a trabajar en equipo con otros niños, valorar otras opciones o puntos de vista diferentes y desarrollar la capacidad de concentración. En definitiva, aprenden a ponerse frente a un desafío, a afrontarlo y a ver que son capaces de lograr avances y resolverlos. A todo esto le añadimos el aprendizaje de tener en cuenta los detalles, así como mejorar la autoestima y la autonomía.